La empresa Zarzuela comenzará previsiblemente el próximo lunes, 26 de enero, las obras de remodelación de la plaza de San Miguel y de cinco calles de su entorno como León, Gardoqui, Concepción, San Diego y Doctor Cazalla, que dejarán el espacio principal como una zona adoquinada con la intención de reducir el tráfico rodado.

El alcalde de Valladolid, Francisco Javier León de la Riva, y el representante de la empresa constructora José Francisco Requejo, han suscrito el contrato de obras de urbanización por un importe de 1.478.849 euros sufragado con cargo al presupuesto municipal y que supone un gasto de medio millón de euros menos de lo previsto en la licitación --1.995.000 euros--.

La actuación tendrá un plazo de ejecución de siete meses y permitirá, según explicó el alcalde, una mejor redistribución del espacio disponible tanto en la propia plaza como en las mencionadas calles.

"Las obras se dirigen a beneficiar a los vecinos y peatones, porque las vías del centro no son zonas de tránsito de vehículos", enfatizó.

El proyecto incluye la eliminación de la actual glorieta ubicada en el medio de la plaza y el adoquinado de todo el espacio con distintos tipos de pavimento, por lo que tendrá una estructura similar a la cercana Los Arces.

El tráfico de vehículos prácticamente se limitará al sector entre la calle León y Doctor Cazalla, mientras que habrá accesos para garajes en Gardoqui y Concepción.

Estudios arqueológicos

El regidor destacó también que se han realizado estudios arqueológicos en el subsuelo de esta plaza que, como recordó, "fue posiblemente uno de los primeros asentamientos humanos de la ciudad".

De hecho, el proyecto contempla el marcado con un adoquín de distinto color de la planta de la antigua iglesia que se situaba en el centro del espacio.

La urbanización completa de esta zona comprende una superficie de 9.200 metros cuadrados, e incluye la renovación de las redes subterráneas de saneamiento y abastecimiento, que, según el Consistorio presentan problemas por su antigüedad, sobre todo en la calle Gardoqui.

Además, se instalará nuevo alumbrado público con veinte columnas y siete soportes de pared, la canalización de reserva para cableado -lo que elimina los tendidos aéreos- y se ajardinará y se plantarán árboles en la Plaza de San Miguel y la calle Doctor Cazalla, con la correspondiente red de riego.

Respecto al arbolado, se conserva el existente (18 ejemplares) y se amplia en otros 27 con un una doble hilera de tilos y ciruelos rojos en la Plaza de San Miguel, mientras que en los laterales habrá tilos y arces.

Por su parte, Doctor Cazalla alternará arces y madroños.

La plaza dispondrá de bancos corridos con asientos de madera sobre perfiles de acero, y bancos de piedra de granito negro.

En total, suman cuarenta metros lineales de banco corrido, además de cinco sillas de madera sobre patas de función, con respaldo y brazos; papeleras, una fuente de agua y contenedores soterrados de hormigón prefabricado para la recogida de residuos.

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