La sequía también afectará al bolsillo del usuario, ya que los ayuntamientos tienen la potestad de cargar en el recibo mensual el incremento del coste que en estas circunstancias tiene la potabilización del agua, que aparece más turbia.

En estado de emergencia

Actualmente hay 56 municipios en situación de emergencia, entre ellos Caldes de Montbui, Sant Celoni y Súria, que han pedido abastecerse con cisternas y captaciones de emergencia.

El director de la Agència Catalana de l’Aigua, Jaume Solà, denunció ayer, aunque sin nombrarlos, que en 40 municipios se consume más de los 280 litros por habitante y día a que obliga la Generalitat por la sequía. Además, 52 de más de 20.000 habitantes no han presentado el plan de contingencia para situaciones de desabastecimiento.

Desierto en la cuenca del río Muga

La extrema sequía ha transformado el paisaje de algunas comarcas. El embalse de Boadella, en la cuenca del río Muga (Girona), presentaba ayer un aspecto desértico (foto). En Lleida, los almendros estaban secos y las balsas de regadío, vacías.

Expediente a centrales eléctricas

La Agència Catalana de l’Aigua ha abierto ocho expedientes sancionadores, y estudia abrir nueve más, a empresas hidroeléctricas situadas en las cuencas del Ter y del Llobregat por dejar los ríos secos o no respetar el caudal de mantenimiento del río establecido en las concesiones. Las empresas se enfrentan a multas que oscilan entre los 6.000 y los 30.000 euros.