Los colegios niñera abiertos en septiembre se quedan cortos

Los padres denuncian la falta de plazas y que los horarios de las actividades no se adaptan a sus jornadas laborales.
Aún queda una semana para que los alumnos de primaria y secundaria empiecen un nuevo curso. Una vuelta al cole que no coincide con la de sus padres al trabajo. Muchos madrileños, que ayer retomaron el curso laboral, aún no saben dónde dejar a sus hijos.

Para no tener que recurrir a los abuelos, la Consejería de Educación ha habilitado durante el verano 278 colegios niñera, abiertos desde las 7.30 hasta las 16.30, donde los niños pueden participar en aulas de naturaleza, talleres artísticos y torneos deportivos. Este año, como novedad, el servicio se ha ampliado a los primeros días de septiembre, ya que las clases no empiezan hasta el día 12.

La iniciativa ha sido calificada como «buena, pero insuficiente» por  la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos Giner de los Ríos. Su vicepresidente, Alfonso Hervás, dice que los horarios son «bastante mejorables» porque «son fijos y no responden a las necesidades laborales de los padres».

Todos los distritos tienen uno o dos colegios abiertos, y en el resto de los municipios de la región hay 73. «Muchos padres tienen que trasladar a sus hijos a colegios que están lejos de sus domicilios», subraya Hervás.

Noventa barracones en Madrid

La presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, se ha comprometido a que en la capital no quede ningún aula prefabricada. No obstante, en la región aún existen cerca de 90 barracones. Para las Apas, este tipo de instalaciones son «fracasos de la gestión política de la Consejería de Educación». Incluso aseguran que algunas de estas aulas prefabricadas llevan «cinco, seis y hasta nueve años, cuando se instalan como medida de urgencia y deberían desmontarse al finalizar el curso académico».

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