La reinauguración del Hard Rock Café de Madrid contó este martes con el apoyo de los artistas y grupos más importantes de la música española,
que donaron algunos de sus más preciados objetos para exponer en el local, el "museo privado del rock más grande del mundo".
Así Mario Vaquerizo, en representación de su mujer
Alaska, aportó
una guitarra de 1999 customizada por unos amigos suyos de Móstoles; después, el grupo
Dover cedió un vestido que utilizaron en la gira de este verano y Frank T regaló su cinturón personalizado.
Por su parte, el dúo
Nena Daconte regaló un mosaico y Rafa de La Unión un chupa de cuero, su favorita,
con la que rodó el videoclip La casa de los sueños en 1991. Por otro lado, Sidonie llevó tres elementos de atrezzo de la gira
Costa azul: una máscara, un turbante y una corona y un bastón.
Los últimos en subir al escenario fueron
La Oreja de Van Gogh quienes cedieron un órgano sintetizador de los 80; y
El Canto del Loco, que también
donó una guitarra y luego cantó en directo. El conductor de la fiesta fue Johann Wald y lo recaudado en los sorteos de entradas fue para la congregación
Cachito de Cielo.
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