A partir del domingo, Renfe establecerá también un "compromiso de puntualidad" con los servicios TRD, por lo que cualquier retraso superior a los 15 minutos imputable a la compañía será indemnizable, que será del 25 por ciento del billete si el retraso es igual o superior a 15 minutos e inferior a 30 minutos, del 50 por ciento si el retraso es igual o superior a 30 minutos e inferior a 60 minutos; y del total del importe si el retraso es igual o superior a 60 minutos.

"Los nuevos horarios se adaptarán de este modo a la duración real del viaje, que viene determinada, entre otros factores, por las obras de infraestructura que se llevan a cabo en la vía férrea", aunque "a medida que las obras terminen, o se incorporen los trenes previstos de última generación, se procederá a la revisión de los tiempos de viaje".

Salamanca y Ávila cuentan en estos momentos con siete servicios diarios de ida y otros tantos de vuelta con Madrid que se prestan con trenes TRD y que se incrementan hasta ocho de viernes a domingo, según subrayó la compañía.

Nuevos vehículos durante el primer semestre de 2009

Estos servicios comenzaron a prestarse en 1999 con tres trenes en cada sentido que fueron utilizados por 244.456 viajeros, que se han ido incrementando al mismo tiempo que se ha ampliado el número de trenes, hasta llegar a superar los 695.000 los durante el pasado año.

En los últimos meses, Renfe está acometiendo un plan de "puesta a cero" de todos los trenes TRD, que consiste en una parada "para mejorar las condiciones técnicas y de confort de estos vehículos, en una operación que supone que cada vehículo estará inmovilizado por espacio de un mes para someterle a una revisión a fondo que afecta a todos los mecanismos del vehículo".