Así lo ha trasladado, en declaraciones a Europa Press, tras reconocer que está "sorprendido" por el gran número de casos en esa residencia, donde también están afectados cuatro trabajadores.

En todo caso, y dada la magnitud del brote en el centro geriátrico, Héctor Manuel Corujo ha señalado que, además de mantener las medidas de prevención ya implementadas, el gobierno local se está planteando suspender ciertos "servicios sensibles", como el servicio de ayuda a domicilio.

Asimismo, solicitará a Sanidade la realización de un "cribado masivo" para detectar posibles contagios en el pueblo o, al menos, pruebas para los familiares de los usuarios y trabajadores de la residencia afectada.

El regidor de O Incio ha señalado que "todavía se está investigando" el origen de ese importante brote, ya que "no hay casos positivos, que se sepa, en el pueblo".

De hecho, ha apuntado que, en las últimas horas, cuando se hizo público que un trabajador de la residencia era positivo en COVID, "hubo cierto nerviosismo" en la localidad, y algunos vecinos se sometieron a pruebas PCR "de forma particular y privada". "Pero todos dieron negativo", ha señalado.