Los empleados de Torraspapel volvieron a cortar, ayer por la mañana, la carretera que conduce a la principal entrada de la factoría que este grupo tienen en Sarrià de Ter como medida de protesta por el ERE presentado por la empresa, que está previsto que afecte a unos 213 trabajadores.

Según ha advertido el comité de empresa, el recorte de actividad que habrá en la factoría y el cambio en el tipo de producción puede afectar indirectamente a unos 5.000 puestos de trabajo.

Tercera jornada de huelga

Los trabajadores han llevado a cabo nuevos cortes puntuales de tráfico y las ocho de la noche han iniciado la tercera jornada de huelga, que ya habían convocado la semana pasada.

La empresa anunció hace unos días que presentaría un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a 213 de los 328 empleados que tiene en esta planta, la mayoría vecinos de Sarrià o de las localidades vecinas.

Desconcierto entre los trabajadores

Los empleados de esta planta no entienden cómo se ha llegado a esta situación, ya que aseguran que la empresa ha tenido unos beneficios brutos de 5 millones de euros y consideran que esta factoría es de las pocas del grupo que genera beneficios.

Además, lamentan que Torraspapel no se haya planteado una rescisión temporal de contratos hasta que se supere la situación de crisis actual y se haya optado directamente por la presentación de un ERE que afecta a 213 personas. Indirectamente, estos despidos y la situación de la empresa afectará a mucha más gente, entre las empresas que suministran materias primeras o los transportistas que trasladan el material, unas 5.000 personas, según el comité de empresa.