En septiembre fueron a la perrera de Mieres a adoptar un perro cuando se encontraron con una imagen que no eran la que esperaban.

Alexia Campos, Lucía Camino y Rosa María Mulas han denunciado ante la Guardia Civil a la Sociedad Protectora de Mieres por la situación en la que viven los animales.

Cuando llegaron había un perro herido "se le veía el hueso en la pata de atrás y tuvimos que obligarle a llevarlo a un veterinario", cuenta Rosa. Finalmente, lo ejecutaron. "No tienen ni comida, ni agua, hay perros muertos en contenedores metidos en bolsas de plástico", ratas y falta de higiene en general.

La Sociedad Protectora se encarga de la perrera, que aunque no es una entidad municipal sí recibe una subvención del Ayuntamiento (el octubre le concedió 25.000 euros para el mantenimiento) y gestiona una instalación que sí es municipal.

El Ayuntamiento de Mieres ha anunciado que investigará lo denunciado por estas tres jóvenes.

CONSULTA MÁS NOTICIAS DE OVIEDO Y GIJÓN