La Policía, en alerta. Carlos Palomino, un joven antisistema, murió hace ahora 12 meses al recibir una puñalada en el corazón. Su agresor era un militar neonazi que acudía a la manifestación que Democracia Nacional (partido legal de tintes xenófobos y racistas) había convocado en Usera para protestar contra la inmigración. Carlos y sus amigos iban a reventar la concentración de la extrema derecha.

La mala suerte quiso que el grupo de jóvenes antifascistas (Carlos tenía 16 años) se topara en el metro de Legazpi con su agresor, Josué E. de la H., de 24 años. Una testigo presencial contó entonces que el hombre, tras detectar su presencia, procedió a «lanzar cuchilladas al aire». Una de ellas resultó fatal.

Amigos y familiares de Carlos han convocado a un acto de protesta masivo que tendrá lugar mañana martes (fecha del aniversario) entre Usera y Legazpi. Fuentes del Sindicato Unificado de Policía (SUP), que cuenta con el único centro de formación y observatorio sobre tribus urbanas de España, explicaron a 20 minutos que la Policía estará en alerta, aunque no está previsto un refuerzo del número de agentes.