La crisis inmobiliaria que se ha dejado ver en el Meeting Point de este año ha repercutido en diferentes sectores económicos de la ciudad, como los hoteles, taxistas y restauradorEs, que echan de menos los años dorados del salón y que han visto bajar su actividad hasta un 30% respecto al año pasado.
La XII edición del salón inmobiliario Barcelona Meeting Point (BMP) se celebra esta semana en Barcelona con un 34% menos de expositores y con la ausencia de grandes empresas como Sacyr, Colonial o Realia. Los taxistas barceloneses han notado una reducción del 30% en sus servicios respeto a otros años en los cuales se celebraba el salón inmobiliario y la tranquilidad de la parada de la plaza España contrasta con otras ocasiones, en que había problemas por coger un taxi.
Desde la Confederación del Taxi se ha dicho que algunos compañeros han comentado que el salón ha sido este año un "auténtico desastre" y que a duras penas se ha notado que la feria estuviera funcionando. La menor afluencia del Meeting Point ha traído aproximadamente un 25% menos de personas a los hoteles de la ciudad, según que ha explicado la Confederación Catalana de Hostelería y Restauración de Catalunya, que ha cuantificado en un 20% el descenso del gasto.
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