Cualquier comparación es odiosa. Y en tiempos de crisis, como la actual, más todavía. Las atenciones protocolarias de los actos organizados por el Ayuntamiento este año han supuesto un gasto para las arcas municipales de 358.000 euros, según se recoge en los Presupuestos aprobados por el pleno. Esta cifra duplica ampliamente a la que se destinaba a estos mismo menesteres en 2001, cuando apenas superaba los 150.000 euros.

Además, en relación al año pasado, el crecimiento del desembolso público ha sido del 15,5%. Dentro de este apartado se incluye todo lo relacionado con la organización de eventos en los que el Ayuntamiento es el anfitrión, desde el catering de comidas hasta la compra de regalos para invitados ilustres.

Resulta llamativo que la partida presupuestaria destinada al protocolo por parte del Consistorio sea muy similar a la reservada al arreglo y mejora de calles dentro del capítulo del mantenimiento de las vías públicas, que este año asciende a 351.000 euros, según consta en las cuentas municipales.

El Ayuntamiento también se gasta una cantidad muy parecida en la Casa de Acogida (375.000 euros), menos de la mitad en la conservación de los museos (140.000) y una cuarta parte en el Plan de Mayores (94.000).

Dinero en coches

Dentro del Presupuesto municipal para 2008 se recogen sendas partidas de 1.000 euros para la conservación del vehículo oficial de la alcaldesa, Rosa Aguilar, así como para el carburante. Además, se reservan 15.000 euros en gasto de locomoción de la regidora y otros 15.000 en dietas.

Todo ello después de que Aguilar haya anunciado que en 2009 se congelarán los salarios de los altos cargos del Ayuntamiento como señal de austeridad ante la crisis.

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