La agencia oficial de noticias ISNA detalló que la planta ha comenzado a preparar el "polvo de uranio concentrado" tras constatar que había finalizado la instalación de las cámaras de vigilancia y seguridad por parte de los expertos del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).

ISNA puntualizó, sin embargo, que aún no se ha iniciado la fase que procesa ese uranio en bruto, y lo convierte en un gas denominado hexafloruro de uranio HF6, que es el primer paso para el enriquecimiento de uranio.

Uno de los miembros del equipo negociador iraní, Mohamed Zaidad, citado por la agencia, indicó que el resto de las instalaciones y trabajos de la central de Isfahan se retomarán "a partir de mañana martes".

Europa presentó una alternativa

La UE presentó el viernes a Irán una nueva propuesta negociadora para solucionar el contencioso nuclear que mantiene con la comunidad internacional, solución que fue rechazada. Antes había advertido al régimen de los ayatolá que si continuaba adelante con su intención de reabrir la central de Isfahan, interrumpiría el diálogo.

El ministro francés de Asuntos Exteriores, Philippe Douste-Blazy, llegó incluso a señalar que la negativa iraní podría constituir "el inicio de una crisis internacional importante".

Irán ha indicado, no obstante, que no tiene previsto continuar con el siguiente paso, consistente en introducir el hexafloruro de uranio HF6 en centrifugadoras para conseguir uranio enriquecido, una sustancia que puede ser utilizada como combustible del armamento nuclear.

La Junta de Gobernadores de la OIEA celebrará mañana una reunión extraordinaria para examinar este nuevo desafío iraní y advertir formalmente al régimen de Teherán de las negativas consecuencias de su decisión.

El régimen de los ayatolá ha declarado que no se siente preocupado por el resultado de la reunión, y que piensa seguir adelante con sus planes.