Los atascos en los que se ven atrapados miles de valencianos cada día en la conexión de la V-21 con la avenida de Cataluña tienen ya fecha de caducidad. El Delegado del Gobierno, Ricardo Peralta, ha anunciado este lunes que las obras del túnel y de la nueva rotonda estarán terminadas a principios de 2009.

Pese a que los desvíos provisionales de tráfico son capaces de absorver 160.000 vehículos sin generar retenciones, cada día se producen colas kilométricas en horas punta.

En este sentido, el jefe de Demarcación de Carreteras, José Vicente Pedrola, y el ingeniero responsable del proyecto, Enrique Ballesteros, han explicado que el Ayuntamiento establece la duración de los semáforos en las entradas de la ciudad, y han asegurado que ha habido momentos en los que este punto ha tenido 40 segundos de luz verde y 120 de roja.

Por otra parte, el túnel constará de 44 cámaras de seguridad y la rotonda superior tendrá tres fuentes ornamentales y una torre mirador visitable de 45 metros de altura.

Las obras comenzaron en agosto de 2006 tras dos años de retrasos desde que se puso la primera piedra y cuentan con un sobrecoste del 40%. El presupuesto total asciende a 23,4 millones de euros. La capacidad del nuevo acceso será de 210.000 vehículos.

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