El Consejo de Ministros de Italia decidirá este martes la posibilidad de destinar 1.000 militares a la región sureña de Campania para ayudar a las fuerzas del orden en la lucha contra la Camorra, la mafia local, tras los últimos asesinatos.

"Evaluaremos si es necesario en Campania sostener a las fuerzas del orden enviando a militares como ya se hace, con óptimos resultados, en las ciudades", explicó el Ministro de Interior, Roberto Maroni.

La hipótesis del envío del Ejército a Campania ha sido barajada en numerosas ocasiones para intentar luchar contra la actividades ilegales de la criminalidad organizada y detener las decenas de asesinatos que se producen cada año debido a las guerras y ajustes de cuentas entre clanes.

En 1997, el Gobierno decidió desplegar a unos 500 soldados en posiciones en centros estratégicos de Nápoles y de otras localidades de la provincia para ayudar las fuerzas policiales a contrarrestar la enésima guerra de la Camorra.

El Ejecutivo de Berlusconi envió al Ejército a Campania hace unos meses para las tareas de recogida de las toneladas de basura que se habían acumulado en las calles y para garantizar el funcionamiento de los vertederos e incineradores.