Además, fuentes de la compañía añadieron que reforzarán las estaciones (ya existentes) de la Fuente de San Luis, Beniferri y el Grao.
Según la empresa, «en Valencia el crecimiento de la demanda es del 9,5%, lo que supone el doble de la media nacional y la máxima de España». Además, prosiguen, de no hacerse estas obras «se produciría un colapso eléctrico en estas zonas y habría un macrocorte de suministro».
Por otra parte, el portavoz del Grupo Socialista del Ayuntamiento, Rafa Rubio, anunció ayer que pedirá en el pleno de mañana «la paralización de las obras de Patraix hasta que esté hecho el informe de la Conselleria de Sanidad sobre los posibles efectos de la planta eléctrica en la salud de los vecinos». A este respecto, Iberdrola reiteró que «es inofensiva» y que las obras seguirán porque «son civiles y tenemos los permisos».
Mientras, el concejal de Urbanismo, Jorge Bellver (PP), criticó la postura de Rubio y declaró que «con su argumento deberían parar todas las estaciones de las zonas urbanas que garantizan el suministro a miles de hogares».
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