Ante esta situación, el pasado lunes 30 de diciembre, desde el Ayuntamiento de Gijón se comunicó a la Empresa Municipal de Servicios de Medio Ambiente Urbano (EMULSA) que comenzara a realizar baldeos de agua en la zona de El Lauredal, según ha indicado el Ayuntamiento en nota de prensa.

Asimismo se trasladó al Principado la preocupación por los datos que se estaban registrando, "ya que es a la administración autonómica a quien compete activar el Protocolo por episodios de contaminación, para lo que no cuenta con la estación de El Lauredal al no pertenecer ésta a la red oficial", indican.

El Consistorio gijonés recuerda asimismo que el Pleno municipal aprobó por unanimidad la necesidad de colocar una estación fija en la zona oeste de la ciudad y que ésta pase a incorporarse a la red oficial, un acuerdo que el Principado aceptó, tras ser informado.

Desde el Ayuntamiento se solicita al Principado que, en tanto en cuanto esto suceda, se tengan en cuenta los valores registrados por la estación móvil de El Lauredal en la que, desde el martes 24 de diciembre y hasta hoy jueves se han superado los niveles de PM10 cada día, excepto ayer miércoles.

Mientras, el Ayuntamiento de Gijón ha decidido adoptar una serie de medidas destinadas, sobre todo, a la población que vive en la zona oeste de la ciudad. Se trata de limitar la práctica deportiva en el exterior, especialmente para aquellos colectivos más sensibles; evitar estancias prolongadas en el exterior de las zonas afectadas; o utilizar el transporte público