El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha hecho este jueves una visita sorpresa a Afganistán, la primera desde que llegó al poder en 2017, en la que se reunió con soldados estadounidenses en la base aérea de Bagram.

"Es una zona peligrosa y quiere apoyar a los soldados", dijo la portavoz de la Casa Blanca, Stephanie Grisham, a los periodistas que viajaron con Trump y que debieron guardar el secreto sobre la visita hasta aterrizar en el país centroasiático

El Air Force One despegó de la Base Conjunta Andrews a las 22:08 horas (hora local) del miércoles y ha llegado cerca de 00:00  horas después a la base aérea afgana, donde ha aterrizado con las luces apagadas por motivos de seguridad.

Trump ha anunciado la reanudación del diálogo de paz con los talibanes y confía en poder llegar a un "acuerdo" para poner fin a la guerra en Afganistán, casi tres meses después de romper las negociaciones con el grupo insurgente a raíz de un atentado en Kabul.

"Los talibanes quieren llegar a un acuerdo, y nos estamos reuniendo con ellos", dijo Trump durante esta visita sorpresa, según informa el diario The New York Times

Trump, que se ha reunido con su homólogo afgano, Ashraf Ghani, tras aterrizar en la base aérea de Bagram, ha resaltado que cree que los insurgentes quieren que se anuncie un alto el fuego.

Asimismo, ha confirmado su voluntad de reducir el número de militares desplegados en el país asiático a 8.600, sin facilitar una fecha para este repliegue. 

El mandatario se ha reunido además con soldados desplegados en la base aérea con motivo del Día de Acción de Gracias, festividad por la que ha compartido un pavo con ellos.