La fiesta que, aunque de origen pagano rinde honores a la Inmaculada Concepción, es una de las más ascentrales de la comarca verata y se celebra para rememorar la tradición de los cabreros que bajaban del monte a rendir tributo a la virgen y la alumbraban con sus escobazos ardiendo que servían también para iluminar el pueblo.
La vicepresidenta tercera de la Diputación de Cáceres, Isabel Ruíz Correyero, el concejal de Festejos y Comunicación del Ayuntamiento de Jarandilla, Pablo López, y miembros del equipo de promoción de la fiesta han presentado este martes el programa que comienza el miércoles, día 4 de diciembre, con un taller de recogida y corte de escobas en el campo.
Ruíz ha destacado el apoyo de la institución provincial a esta fiesta que aúna historia, tradición, leyenda, magia, música y fuego. Este año, como novedad, se presentarán unas gafas de realidad virtual en el Museo de Los Escobazos para hacer un recorrido de 360 grados por la fiesta, desde el comienzo hasta el fin de la procesión, incluida la batalla del fuego en la Plaza de la Constitución.
ESCOBÓN DE ORO
Según ha explicado López, el Escobón de Oro, que el año pasado recayó en el chef Quique Dacosta, ha ido a parar en esta ocasión a Pedro Cañadas Robles, que regenta el restaurante Puta Parió en la localidad desde hace cuarenta años. Este reconocimiento supone una mención especial para personas que desarrollen una labor especial en beneficio de Jarandilla y por eso se quiere reconocer la aportación de Cañadas a la fiesta y al desarrollo local.
El premio se entregará en la mañana del sábado, día 7 de diciembre, jornada central de la festividad. Durante toda la mañana las personas que quieran podrán visitar los lugares donde se ubican las hogueras, una de más de 15 metros de alto y otras cinco o seis de diez metros en las que se prenden después los escobazos.
A las cinco de la tarde se celebrará la misa y la novena en la iglesia de Santa María de la Torre y, posteriormente, se realiza la representación de la bajada de los cabreros de la sierra para seguir, a las 19,00 horas, con la quema de los escobones y hogueras y "saludar" al prójimo con un toque "amistoso" en la conocida como "batalla del fuego", ha explicado López.
Cabe recordar que para evitar cualquier percance en el desarrollo de la fiesta, se aconseja utilizar ropa vieja no inflamable, tapar la cara, la cabeza y las manos, y solo se puede dar con los escobazos de cintura para abajo. No obstante los organizadores han destacado que "nunca se ha sufrido ningún accidente".
Después del acto central de la fiesta de Los Escobazos, a partir de las 21,00, saldrá en procesión el Estandarte de la Inmaculada Concepción que será alumbrada por las escobas ardiendo y amenizada por cánticos tradicionales.
Según las narraciones orales, fueron los cabreros y pastores los que comenzaron con esta fiestas, cuando, en la víspera de la Inmaculada, bajaban de la sierra por la noche para celebrar ese día en el pueblo. Con el fin de poder avanzar y ver el camino decidieron utilizar antorchas hechas de retama o escobazos, lo que ha dado origen a este festejo que cuenta con la declaración de Interés Turístico Regional.
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