"Quiero llevar a mi hijo a Maristas, pero se ha quedado fuera de las tres opciones que pedí y lo envían a Padre Manjón, en medio de la huerta de Valencia y a kilómetros de mi casa". El problema que vive la valenciana María Díez afecta a muchos padres que, llegado el momento en que los más pequeños acaban la guardería, no pueden acceder al colegio privado con ciclo de infantil elegido.
Su caso es fiel reflejo de lo que ha sucedido a 6.000 escolares de la Comunitat, que se han quedado sin plaza en los colegios concertados católicos elegidos en primera opción, según los datos que maneja la
Se trata de un problema que se repite año tras año. "En el caso de mi hijo hay 25 alumnos por clase, y queremos que se amplíe la ratio un 10% porque es legal", explica María. "
Como solución, el inspector de zona les propuso "montar barracones en el antiguo cauce del río Turia, pero se lo denegaron por ser zona inundable, y además no los íbamos a llevar ahí", relata. La alternativa es dejarlos en casa o escolarizarlos lejos del domicilio familiar.
Dos centros están desbordados
El colegio San Juan Bosco de Valencia y el de la Inmaculada de Alicante son los dos con mayor demanda como primera opción en la Comunitat para el curso que viene, según los datos de la Conselleria de Educación recogidos por Fere-CECA. De hecho, son los únicos que sobrepasan las 200 solicitudes (244 en el primer caso, para 46 nuevas plazas, y 212 en el segundo). Otros centros como El Pilar, Maristas o Esclavas en Valencia, así como El Calasancio de Alicante, se encuentran en el ranking de los más demandados por los padres valencianos para Infantil y Primaria, según refleja esta estadística.
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