Demasiada oferta la de este fin de semana pasado. Los dos festivales más importantes del verano, con permiso de

Rock in Rio,

FIB y

Summercase, han superado la prueba de fuego de 2008 con un aprobado raspado.

Ambos han perdido público, aunque sus carteles rebosaban calidad y, en algunos casos, originalidad.

En Benicàssim se han congregado

en cuatro días 148.000 melómanos, la mayoría británicos, 2.000 menos que el pasado año. La noche que el certamen reservó para Madrid, el

Saturday Night Fiber, reunió a 9.000 personas. El Summercase atrajo, en total,

a 81.000 asistentes en Barcelona y Madrid. Ha perdido 28.000.

Buena parte de la culpa la ha tenido la coincidencia en fechas. Summercase decidió celebrar sus conciertos a la vez que el FIB, que contraatacó con una pequeña fiesta festivalera en la capital. Las dos citas, de carácter indie,

hicieron así escoger, inevitablemente, al despistado público entre una de las dos.

El FIB promete más presencia en Madrid, mientras que

Sinnamon, promotora del Summercase se congratula "de la confianza depositada por parte

de todos aquellos que han apostado" por ellos. Hace unos meses hubo rumores de suspensión de pagos desmentidos tajantemente por la organización a

20minutos.es.

No obstante, también hay que mirar alrededor,

hacia otras ciudades y otros países, puesto que no todo es música independiente lo que reluce. Quizá hubo quien pudo ir a Córdoba a ver a

Gary Moore cerrando el

Festival de la Guitarra. O a Dortmund, que acogía el sábado el tradicional desfile del

El

Boss Springsteen dió también sendos conciertos en Barcelona el sábado y el domingo y

Patti Smith tocó el domingo en la Expo de Zaragoza; el pianista Michel Camilo, hizo lo propio en Segovia, y gratis. Y esto es sólo un botón de muestra de lo difícil que fue para algunos decidirse a acudir a un concierto este pasado fin de semana.

¿Fuiste a alguna de estas citas musicales? ¿Crees que deberían espaciarse más los conciertos y los festivales?

Danos tu opinión.