El verano es la época en la que las empresas de seguridad incrementan su actividad debido a que muchas familias se van de su domicilio habitual y las empresas cierran por vacaciones. Sin embargo, este año la crisis económica ha provocado un bajón en la venta de sistemas de protección.

Según diversas firmas de este sector consultadas por 20 minutos, durante este periodo estival la instalación de alarmas y otros dispositivos ha crecido un 15% respecto al resto del año, cuando lo habitual era que el alza fuera del 30%.

Todos coinciden en echarle la culpa de esta situación al proceso de desaceleración que vive la economía. Fuentes de la empresa Mecanoex indican que «la situación económica está provocan que la demanda de alarmas esté siendo más baja que otros años». No obstante, el presidente de la Asociación Provincial de Empresas de Seguridad, Esteban Granero, explica que

Granero señala que los barrios donde más se incrementa la instalación de estos dispositivos en la época estival son los que cuentan con más viviendas unifamiliares, como El Brillante, El Tablero o el Centro. Según las compañías consultadas, la compra de un sistema de seguridad requiere un desembolso mínimo de 400 euros.

Consejos para evitar sustos

A partir de ahí el precio se incrementa tanto como servicios quiera disponer el cliente. El presidente del citado colectivo, formado por ocho empresas, indica que «Córdoba es una ciudad tranquila en la que en los últimos años no ha habido aumentos considerables del número de delitos cometidos».

La Asociación Provincial de Empresas de Seguridad da una serie de recomendaciones para evitar los temidos robos en verano. Entre ellas se encuentran dar la menor publicidad posible del viaje que se va a realizar, pedir a alguien que recoja el correo periódicamente o instalar una puerta blindada.

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