La autopsia confirma que el joven búlgaro de 29 años que ayer falleció después de permanecer durante horas en la playa, sufrió un golpe de calor. La autopsia revela que el joven sufrió un fallo multiorgánico motivado por el calor.

Cuantos más datos se conocen sobre este suceso más escalofriante resulta el caso.

Según El diario de Mallorca el joven agonizó en Cala Major durante horas sin que nadie se percatara de la gravedad de su estado. "Yo tenía mi toalla a menos de un metro de él, pero no noté nada raro, porque no tenía mal aspecto. Y no me percaté de nada hasta que vi que respiraba muy fuerte, muy acelerado, y soltaba una especie de ronquidos. Unos chicos que había al lado le oían y se reían. Me acerqué y vi que tenía la boca llena de espuma. Entonces me di cuenta de que estaba mal", le cuenta a dicho diario una joven vecina de Palma.

Al parecer fue ella quien dio la voz de alarma y avisó al socorrista. Según su relato, al principio el socorrista no prestó demasiada atención al chico, y se limitó a preguntar si estaba solo o con algún familiar. Poco después se les unió otro socorrista. Finalmente, ante la insistencia de los curiosos que les conminaban a hacer algo, llamaron al 112.

El joven,  identificado como Vladimir P., fue trasladado al hospital Son Llàtzer , donde falleció el martes, después de permanecer tres días en estado crítico.

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