La tranquilidad de los comerciantes, turistas y vecinos del centro en general tras la detención este jueves pasado por la mañana de la banda de seis rumanas (algunas menores) que se dedicaban a robar carteras, bolsos y teléfonos móviles sólo ha durado unas horas.

Así, alrededor de las 11 horas, la Policía Nacional las pilló con las manos en la masa en la calle Xàtiva y las detuvo, después de varios días siguiéndoles la pista por las quejas tanto de comerciantes como de varios consulados europeos ante los innumerables robos a turistas.

Sin embargo, por la tarde, los mismos comercios de la calle Xàtiva observaban con asombro cómo estaban de nuevo haciendo de las suyas.

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