Joan trabaja en la construcción en una obra exterior. No lleva ningún elemento de protección individual: casco, guantes, arnés, etc. Tampoco chaleco ni botas adecuadas. Justo lo contrario que su compañera Maria, que así podría evitar cortes o caídas inesperadas. Ambos desfilaron ayer en la Rambla de Santa Mònica junto con otros seis trabajadores de la sanidad, soldadores y carniceros de matadero.
«Queremos demostrar la diferencia que hay entre llevar o no esos elementos de protección», afirmó el portavoz de Avalot-Joves de la UGT, Chakir el Homrani, que pide conocer cuántos de los 105 fallecidos o de los 1.292 heridos graves en el tajo en 2007 en Catalunya eran jóvenes. Y es que son los jóvenes los que padecen más contratos temporales y precarios, que acarrean más siniestralidad.
También aprovecharon para cargar contra la directiva europea que permite elevar la semana laboral a 60 horas. El sindicato pide a los empresarios menos contratos temporales y más prevención; a la Administración, publicar las empresas con más siniestros; a la Inspección, duplicar al menos la plantilla de inspectores, y a los gobiernos, planes en seguridad y salud laborales.
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