La alcaldesa de Sanlúcar de Barrameda, la socialista Irene García, anunció esta mañana que el equipo de Gobierno va a realizar un estudio técnico y jurídico que sirva de base para "exigir compensaciones económicas" que palien el impacto que puede provocar en la localidad la turbidez que presenta el río Guadalquivir.

En rueda de prensa, la alcaldesa subrayó que desde el Consistorio están trabajando para "buscar todos los instrumentos al alcance para solucionar el problema" y agregó que, ha llegado el momento de exigir respuestas y soluciones inmediatas".

La regidora destacó el trabajo del Ayuntamiento "desde el primer momento", manteniendo conversaciones con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con la ministra de Medio Ambiente, con el viceconsejero de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, con el presidente de Puertos del Estado, con el secretario de Medio Rural y Marino, con la delegada provincial de Medio Ambiente, con el delegado del Gobierno de la Junta en Cádiz, con el presidente de la Diputación provincial y con el alcalde de Trebujena.

A juicio de la alcaldesa, "hay que continuar investigando el origen de este problema, ya que a día de hoy no se conoce. Lo único que sabemos es que no hay ningún tipo de contaminación en las aguas, ningún tipo de efecto nocivo, pero desde el punto de vista estético no tiene el color que a todos nos apetecería".

Merece un trato especial

Por otro lado, la consejera de Medio Ambiente, Cinta Castillo, también anunció esta mañana que su departamento ha establecido una mesa de seguimiento interadministrativa en la que también participarán expertos para resolver los problemas de turbidez y salinidad que presentan las aguas del río Guadalquivir.

En su respuesta a una pregunta oral realizada en el Pleno del Parlamento de Andalucía, la titular del ramo indicó que esta mesa estará compuesta por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), la Demarcación de Costas del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, la Consejería de Medio Ambiente, la delegación provincial de Sevilla de la Consejería de Agricultura y Pesca y por el Puerto de Sevilla.

Asimismo, Castillo dijo desconocer las causas que han provocado la turbidez y la salinidad en el Guadalquivir, si bien negó que se deban a un vertido y se decantó por un comportamiento "anómalo por natural del río Guadalquivir", que según dijo, puede deberse al comportamiento de las mareas, a la "intensa sequía" o a las condiciones aerodinámicas del río. No obstante, subrayó que "no hay ninguna determinación que nos indique que la causa no sea natural".

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