La lluvia, la actividad sísmica y la falta de vegetación en algunas zonas está provocando el deterioro del Tajo de San Pedro, sobre el que se levantan los palacios Nazaríes y la Torre de la Vela en la Alhambra.

Por eso, un grupo de investigadores de la Universidad de Sevilla ha propuesto la colocación de una malla metálica con anclajes para contener los movimientos del terreno y evitar la aparición de grietas e incluso de posibles roturas en las murallas del conjunto.

El trabajo corre a cargo del Grupo de Estructuras y Geotecnia de la E. T. S. de Arquitectura, que ya ha cartografiado las hendiduras más importantes localizadas en la cara norte del monumento y las de la cerca que acota su entorno.

La solución planteada por estos expertos consiste en una malla comprimida contra el talud por medio de anclajes. El objetivo es contrarrestar el proceso de extensión y debilitamiento del terreno, conservando el aspecto actual del Tajo. Para que la malla se confunda con el terreno deberá ser de color metálico mate y se reforestará la zona con especies autóctonas.

Los efectos más graves para esta parte de la Alhambra se producirían si ocurriese un terremoto importante. La Torre de la Vela sería la peor parada. El último desprendimiento en el área más próxima al Tajo se produjo en 1985.

CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE GRANADA