La vivienda, los carburantes, el pan y, ahora también, los helados. Ni siquiera este alimento que sirve de refresco en verano se libra del encarecimiento de muchos productos que se está produciendo en los últimos meses. Según informa a 20 minutos el presidente de la Asociación Provincial de Heladeros y Horchateros , Julián Colomina, el precio de este producto subirá un 5% en relación al año pasado.

De esta manera, una tarrina ya cuesta entre 2,1 y 5,1 euros, mientras que un helado de cucurucho está en la franja de entre 1,1 y 2,6 euros en función del tamaño. Colomina achaca este aumento del precio a la carestía de las materias primas, sobre todo la leche, que ahora cuesta entre un 20 y un 30% más.

El periodo estival es clave para la supervivencia de gran parte de las heladerías que hay en Córdoba. La asociación calcula que cada persona se come al año de media cinco helados, de los que tres se consumen a lo largo de los meses de verano.

La influencia del calor

El calor sigue siendo determinante a la hora de que se tomen más o menos helados. Colomina asegura que en los días de primavera o verano en los que hace menos temperatura de la normal las ventas caen hasta un 60%.

En cuanto a los sabores preferidos por los cordobeses, este colectivo destaca que se mantienen el liderazgo de los clásicos, como son el turrón, el tutti-frutti y la stracciatella.

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