Durante su comparecencia en la Junta General, la responsable de Hacienda ha apuntado que su departamento revisará el sistema tributario "dentro del margen" que permita la normativa de estabilidad y garantizando "siempre" su carácter progresivo y solidario. Ha querido en este punto "desmentir el mantra de que Asturias es un infierno fiscal". "Ni hay infierno fiscal ni mucho menos una política tributaria que desincentive la actividad económica", ha añadido.
Así, ha explicado que en 2018 los tributos cedidos en los que tiene competencia el Principado suponen el 1,25 por ciento del total. Incorporando los impuestos propios, ha explicado, la media de presión fiscal es del 1,53 por ciento.
A lo largo de esta legislatura, Cárcaba se ha comprometido a revisar el sistema, de manera que pueda ser útil para apoyar políticas "relevantes" que incluyan medidas que fomenten la actividad económica, que favorezcan al medio rural, que permitan hacer frente al reto demográfico, o que impulsen "iniciativas innovadoras".
En materia fiscal, la consejera de Hacienda se ha comprometido a seguir incrementando el esfuerzo en la lucha contra el fraude fiscal, para lo que se irán aprobando y mejorando cada año los Planes Anuales de Control Tributario.
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