La Comunitat necesita duplicar los 163 psiquiatras con los que cuenta a día de hoy en las tres provincias para atender a enfermos mentales, hasta alcanzar la cifra de 336. La denuncia parte de la Plataforma de Salud Mental de la Comunitat, que ha cruzado los datos de la Sindicatura de Greuges, Instituto Valenciano de Estadística y la Asociación Española de Neuropsiquiatría con las necesidades que fijó la Conselleria para 2004, pero que no se llegaron a cubrir.

Este informe hace especial hincapié en la falta de profesionales sanitarios: sólo hay 1,57 psicólogos por cada 100.000 habitantes, cuando Sanidad fijaba un mínimo de 6, y en enfermería hay 1,35 profesionales en activo frente a 6,5 necesarios.

Además, cinco hospitales siguen sin unidades para ingresos de enfermos agudos: General y Magdalena de Castellón, el de Portaceli en Valencia, y los de Dénia y Elda en la provincia de Alicante.

Desde la Plataforma, integrada por médicos, familiares de pacientes y asociaciones, critican la privatización de recursos como los centros de día y de rehabilitación, para los que hay «una lista de espera enorme», indica Concha Frutos, miembro de la misma. «La Comunitat está a la cola en atención y recursos, y nada indica que la situación vaya a cambiar», concluye.

Obstáculos en la inserción laboral

Una de las barreras que más cuesta sortear a los enfermos mentales es la de acceder a un puesto de trabajo. El rechazo que a veces provoca el desconocimiento de estas dolencias es más acentuado en Valencia capital, donde casi no hay iniciativas que favorezcan su inserción, indican desde la Plataforma de Salud Mental. En Alicante «hay algo más», y dos empresas de Aldaia, Albanta Jardines y Albero Artesanos, han sido creadas por equipos de profesionales de salud mental para emplear a este colectivo. El 25 de este mes, una jornada lúdica en la plaza de la Virgen de Valencia pedirá más recursos para los enfermos.

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