Según ha indicado el Ayuntamiento tomareño, desde el martes y hasta el viernes, los aspirantes se someterán a las diferentes pruebas físicas contempladas en la convocatoria que determinarán su nivel de aptitud para el puesto y, en consecuencia, su paso al siguiente nivel del proceso selectivo.
Entre las mencionadas pruebas físicas se encuentran las de resistencia, de 1.000 metros lisos; de velocidad, de 50 metros; flexibilidad y potencia del tren superior e inferior.
Además, los aspirantes tendrán que pasar también un reconocimiento médico y, aquellos que logren superar las pruebas físicas, deberán someterse a un test psicotécnico y a unos exámenes de conocimiento. Todas estas fases tendrán un carácter eliminatorio. El proceso culminará a finales de año.
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