La excusa es siempre la misma: «sólo un par de minutos». Unos minutos que se convierten en media hora o más, y al final, hileras de coches mal estacionados interrumpen la circulación fluida en algunas zonas de la ciudad.

Ni las multas de la Policía Local, ni la grúa, ni el coche ponemultas han logrado todavía disuadir la doble fila en capital hispalense.

Aunque son muchas las zonas donde se comete este mal estacionamiento, Sevilla tiene diez puntos negros donde esta infracción es algo que se ha convertido en habitual. A veces incluso llega a ocupar hasta tres filas.

Según los datos de la delegación de Movilidad, a fecha de 23 de abril, las calles más conflictivas de toda la capital por la frecuencia de la doble fila son: Antonio Buero Vallejo, San Jacinto, José María Moreno Galván, Luis Montoto, Almirante Lobo, Adriano, Feria, Asunción, Doctor Fedriani y López de Gomara.

La lucha para erradicarla deja cada día un balance de 63 multas. Del 1 de enero al 22 de abril, La Policía Local ha cursado un total de 5.947 denuncias debido únicamente a la doble fila (sanciones de 96 a 200 euros).

A ellas hay que sumar las del coche ponemultas que, al fin, lleva más de un mes circulando y sancionando sin dificultades. Fuentes policiales calculan que puede estar pillando a diario un centenar o más de infracciones (doble fila, mal aparcamiento...).

El problema del mal estacionamiento, según el sindicato de policías locales SPPME, es que Sevilla no puede absorber a tantos vehículos.

La solución para disuadirlo y eliminarlo, según ellos, pasa por reducir los coches fomentando el transporte público o, con más aparcamientos.