"Somos un sector con más peso del que se creen, pero no se nos hace caso. La situación es muy grave y alguna medida tendremos que tomar si la Junta sigue sin atender nuestras peticiones de reunión", han asegurado los representantes del sector en UCCL, Juan Carlos Pérez, Enrique Cortés, Valentín García y Carlos Gatón en una rueda de prensa en las que han informado sobre el problema que tiene el colectivo.

"Exigimos soluciones a problemas serios que ya no se pueden demorar", ha incidido para lamentar que la Junta siga sin reunirse con los responsables del sector. "Hemos estado esperando a que se conformara el nuevo Gobierno, pero ya no podemos hacerlo más, es urgente", han insistido para asegurar que se sienten "ganaderos de segunda categoría".

Sus reivindicaciones pasan por una nueva ley que ordene el sector, con un "nuevo mapa apícola" de población para saber la capacidad de "carga" que admite cada territorio; que se cumpla la normativa de "guías" en trashumancia atendiendo a la Ley de Protección Ambiental; las distancias entre explotaciones y que se identifique cada "núcleo".

Unas medidas que van encaminadas a evitar problemas de salubridad entre las colmenas, "fundamental" para evitar que se propaguen enfermedades que acaben con las abejas. "Aquí si hay algún problema de salud no podemos confinarlas las como se hace con el resto del ganado, por eso es fundamental que se cumpla la normativa", han explicado.

Desde UCCL lamentan que enfermedades que estaban "controladas", ya no lo están por la falta de sanciones "duras". "Falta un control en el movimiento de las colmenas ilegales", agregan para incidir en que se tratan de "ganaderos profesionales" que no tienen "dos o tres colmenas" por diversión, sino como medio para generar un rendimiento económico con el que poder "vivir".

"Ahora que se habla tanto de la España vaciada, lo que tiene que hacer la Administración es proporcionar las condiciones necesarias para que las actividades económicas que se generan en los núcleos rurales sean rentables", ha apostillado para recordar que la apicultura es el único sector ganadero que ha aumentado sus incorporaciones en tiempos de crisis.

Según los últimos datos de los que dispone UCCL, y que datan de 2017, en Castilla y León hay un total 5.446 explotaciones, de las que solo 597 cuentan con más de 50 colmenas, es decir las "profesionales". "Hay más colmenas en la Comunidad -44.8233- que en todo Estados Unidos", han señalado, de ahí la importancia de ser "riguroso" con el cumplimiento de la normativa.

PRODUCCIÓN

Todos estos factores, acompañados de una "sequía" que también ha afectado al sector, provocan que la producción se reduzca este año cerca de un 20 por ciento, según han estimado los responsables de UCCL. "En las mieles claras apenas ha habido producción; en las de girasol y lavanda se espera una reducción del 50 por ciento y en las negras, de roble y encina, entre el 30 y el 40 por ciento", han explicado.

Además, el precio de la miel ha caído en torno al 40 por ciento, un problema "estructural" del sector. En este punto han advertido de que no todas las mieles cumplen la normativa, de ahí que hayan vuelto a pedir a la Junta que "salvaguarde" los derechos tantos de los productores como de los consumidores.