Durante los días 1, 2 y 3 de mayo estará vigente un bando municipal por el que quedará expresamente prohibido beber en la vía pública y se cerrará el botellódromo, una medida con la que el Ayuntamiento busca contrarrestar la convocatoria de un macrobotellón el 3 de mayo, Día de la Cruz, y que se suma a la prohibición introducida el año pasado de instalar barras en la calle.

En la reunión también se ha acordado desplegar durante esos días un amplio dispositivo de seguridad, formado por agentes de las Policías Nacional y Local, así como de la Guardia Civil, cuya cifra se concretará en una próxima reunión.

El subdelegado del Gobierno, Antonio Cruz, matiza que "no se trata de tomar la ciudad policialmente, sino, simplemente, de que haya un dispositivo todos los días, en los puntos clave de la ciudad, a partir del 30 por la noche".

Cruz explica que dicho dispositivo se basará en "la experiencia que ya tenemos" en este tipo de concentraciones, por lo que no diferirá mucho de los dispositivos desplegados ante la convocatoria de macrobotellones pasados.

Las "cervecitas, en los bares"

Por su parte, el alcalde de Granada, José Torres Hurtado, se muestra convencido de que "los jóvenes granadinos no van a entrar en estas manipulaciones que quieren hacer desde fuera" y les da "las gracias de antemano, porque estoy seguro de que van a colaborar con la ciudad".

El alcalde afirma que el dispositivo de seguridad tendrá carácter "preventivo" y que "simplemente servirá para, esos días, ver la ciudad mucho más protegida, con más policías, para poder pasar un Día de la Cruz tranquilo y feliz, viendo nuestras cruces y tomándonos nuestras cervezas en los bares, que para eso pagan sus impuestos, para que les consumamos también a ellos".