La tercera teniente de alcalde, Imma Mayol, afirmó ayer que este barrio es «una buena ubicación» porque es accesible en transporte público y próximo a la Ciutat Judicial, situada entre Barcelona y L’Hospitalet.

 

 

Mayol dejó claro que, además, la capital catalana debe tener una cárcel en régimen abierto, por ejemplo, en la actual Wad-Ras, pero, a cambio, reclamó que la zona «debe ser liberada de cargas urbanísticas para que sea un espacio ciudadano».

 

El secretario de Serveis Penitenciaris, Albert Batlle, afirmó que la Generalitat no se cierra «a ninguna alternativa» sobre la ubicación de la cárcel de preventivos en la capital catalana. Ayer se firmó un convenio para que los reclusos ayuden en tareas de prevención de incendios en las zonas semiforestales de Barcelona.