Cerca de mil personas acusadas por homicidio y feminicidio, entre ellas 31 menores de edad, fueron detenidas este martes en una megaoperación desplegada en 22 de los 27 estados de Brasil, informaron fuentes oficiales.

La segunda fase de la denominada "Operación Cronos" resultó en el arresto de 912 personas investigadas por homicidio y de otras 56 por feminicidio, según un comunicado del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública.

El principal objetivo de la acción fue hacer efectivos mandatos de prisión expedidos por la Justicia brasileña que pesaban contra los sospechosos.

El presidente de Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro, dijo en sus redes sociales que con esta operación "gana la población de bien", en línea con su visión de "mano dura" contra la criminalidad en su país.

Por su parte, el secretario ejecutivo del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, Luiz Pontel de Souza, señaló en rueda de prensa que las autoridades han identificado a algunos presos "ligados a facciones" que operan en el tráfico de drogas y armas en Brasil.

El operativo fue posible gracias al trabajo conjunto de las policías civiles en los estados brasileños y al apoyo de la Secretaría de Operaciones Integradas del mencionado ministerio.

En este sentido, el presidente del Consejo Nacional de los Jefes de la Policía Civil, Robson Cândido, destacó a los periodistas que la integración de los cuerpos de seguridad "es el camino para alcanzar el objetivo de traer paz a la sociedad".

Brasil ha registrado en los últimos años una media de 60.000 muertes violentas al año convirtiéndolo en uno de los países del mundo más azotados por este problema.

En la primera fase de la "Operación Cronos", desplegada en agosto del año pasado, las autoridades brasileñas detuvieron a 2.968 personas, centenares de ellas por crímenes relacionados con la violencia machista.

Igualmente fueron detenidas 640 personas in fraganti por tráfico de drogas y posesión o porte irregular de arma de fuego.