Los inicios del banquero pontevedrés sirvieron como preámbulo de su exitosa carrera profesional, al ser el primero de su promoción a las oposiciones para Abogado del Estado y la 3ª mejor nota de la historia de este cuerpo.

En la década de los 80 realizó la operación económica más importante hasta el momento al vender el Grupo de Empresas Antibióticos S.A. a la multinacional italiana Montedison por 58.000 millones de pesetas.

Estos avales, unidos a la defensa a ultranza que hizo de Banesto frente a la OPA hostil presentada por el Banco Bilbao, le supusieron el nombramiento como presidente del Banco Español de Crédito con tan sólo 37 años.

Dos años más tarde, se hizo con la presidencia del Banco Banesto, en donde en tan sólo dos años convirtió los números rojos en los que se encontraba la entidad en dividendos para los accionistas.

Sin embargo, la sentencia del juicio Argentia-Trust cambió radicalmente el curso de su carrera, que se vio truncada por su ingreso en prisión.