CC.OO. indicó que las líneas 1 y 6 de Metro de Madrid, que transportan un tercio de todos los viajeros del suburbano, redujeron durante el pasado año el número de trenes en servicio, lo que provocó más saturación de viajeros en los vagones y más tiempo de espera en los andenes.

El sindicato, que conoció hoy los datos de la Memoria de Metro 2007, señaló que la línea 1, que ha sido ampliada, "empeora" su frecuencia, es decir, los trenes tardan más en pasar y ha disminuido un 9,2 por ciento su capacidad de viajeros por hora. Como los usuarios han aumentado con respecto al año anterior, el resultado "no puede ser otro que esperas más largas y trenes más llenos en una línea que ya estaba saturada en hora punta", apuntó.

Por su parte la línea 6, "que sigue siendo la mas saturada en los últimos años", pierde un tren en uno de sus sentidos y también disminuye su capacidad de viajeros por hora, en este caso, un 3,4 por ciento. Lo mismo sucede con MetroSur, afectando a menos viajeros. "Durante el pasado año no se han incorporado nuevos trenes ni se ha instalado la señalización que permitiría aumentar la capacidad de estas líneas", añadió.

CC.OO. de Madrid indicó que la Memoria, presentada hoy al Consejo de Administración, muestra el "despilfarro" de la compañía con unos datos "preocupantes, con un crecimiento insostenible de los costes mientras empeora el servicio en las líneas con mas viajeros".

Por un lado, aunque se ha invertido en torno a 4.000 millones de euros y la red ha crecido en 58 kilómetros con 56 nuevas estaciones, los costes se han incrementado el 40 por ciento en un solo año y los viajeros crecieron el 4,6 por ciento. Una cifra, que según el sindicato y basado en los datos del INE, coincide aproximadamente con la pérdida que han tenido los autobuses urbanos de la región. El sindicato calificó de "discreto" el crecimiento del número de viajeros y aseguró que no se corresponde al 25,6 por ciento que ha supuesto la ampliación de la red inaugurada el pasado año.

Además, indicó que el coste medio de un viaje se ha incrementado en un 33 por ciento y que la mayoría de gastos se han correspondido al pago por arrendamientos de los túneles y los trenes. "Estos pagos, que en 2007 han supuesto ya más de 300 millones de euros, derivan de la decisión del Gobierno regional de no construir las infraestructuras ni comprar los trenes directamente", lo que para CC.OO. tiene como único objetivo "el intento de camuflar la deuda regional, sin importar los sobrecostes que pueda comportar".