Javier Botet nació en Ciudad Real, hace 30 años, con el síndrome de Marfan; una enfermedad que le ha originado

mala salud y un cuerpo peculiar. Debido a esto, ha sufrido cuatro intervenciones quirúrgicas, una de ellas a vida o a muerte.

Pudo quedarse en casa,

lamentándose por su mala suerte, pero prefirió luchar por su sueño:

trabajar en el cine. Gracias a su artístico esqueleto y gran talento interpretativo, ha trabajado con grandes directores del cine como Jean Jacques Annaud, Brian Yuzna o Jaume Balagueró y Paco Plaza en

Rec.

Porque me apetece trabajar en cosas nuevas y arriesgarme. Conocí al Ezcritor una mañana que vino a mi estudio a hacerme una entrevista para su blog de

20 minutos y me cayó bien. Descubrí que era un friki como yo. Cuando vi el primer capítulo de

Amor sobrenatural no dudé en ofrecerle mi ayuda desinteresada.

¿Qué te gusta de la serie?

El equipo, gente que ama hacer cine, y sobre todo la trama de la serie: es el sueño de todo friki. Un perdedor que se enfrenta con el mismo Satán y se convierte en super héroe. Además, siempre quise hacer el papel del diablo. realizar una serie para Internet es algo nuevo, algo divertido. Poco presupuesto, pero mucha imaginación y libertad creativa.