Ahí están ellos jugando al equívoco y demostrando querer estar tan equidistantes de The Beatles como de Metallica.
Estarían en su mente los títulos de dos álbumes básicos de los maestros a seguir cuando bautizaron su álbum de retorno como The black and white album con ese Tick tick boom, que era todo un pildorazo, en donde volvían a demostrar que les gusta el oscuro garaje y que prefieren a Iggy Pop con The Stooges en los tiempos del sonido Detroit y que no desdeñan que se les transparente un ramalazo Ray Davies-Kinks-costumbrista.
Y que a nadie le sorprenda que se empeñaran en que produjera Pharrell Williams, especialista en sacarle lustre a las proclamas sincopadas hiphoperas. Fuerza y energía sin cuartel.
La última prueba fue el domingo de cierre del FIB 07, cuando triunfaron ante el público asistente y su cantante acabó en las alturas.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios