En una nota de prensa, esta plataforma ha rechazado, en este sentido, el festejo del "ejercicio de la fuerza, la intolerancia religiosa, la discriminación social", y "la obligatoriedad de usos e ideas" que, a su parecer, conllevan la una celebración "de carácter colonialista e imperialista, que festeja la invasión de Andalucía".

"Reafirmar el contenido" de la Toma supone, "otra vez más, aumentar la legitimidad a dichos discursos fascistas y racistas enaltecidos por las organizaciones fascistas y amparados por las instituciones", han indicado desde la plataforma.

Han abogado también por la sustitución del 2 de enero como fiesta local de Granada por el 26 de mayo, "día del asesinato de Mariana Pineda, que sí representa un espíritu de libertad y rebeldía".

En una entrevista con Europa Press, el delegado de la Junta en Granada, Pablo García, se mostró partidario de "proteger" el Día de la Toma de Granada por los Reyes Católicos, que se celebra cada 2 de enero, con una figura cultural específica que reconozca la singularidad de esta conmemoración y la aleje de "polémicas y estereotipos".