Las autoridades tailandesas y las del aeropuerto de Phuket buscan acabar con la moda turística de acudir a la playa de Nai Yang para tomarse una foto con un avión comercial aterrizando a escasos metros de la cabeza de las personas.

Esta playa se ha convertido en una oportunidad muy popular entre los visitantes del lugar para tomar espectaculares fotos de ellos en la playa con un avión aterrizando muy cerca de sus cabezas debido a que la playa de Nai Yang se encuentra pegada a la única pista de aterrizaje que tiene el Aeropuerto Internacional de Phuket.

En las últimas semanas se ha viralizado a información que apuntaba que Tailandia podría castigar hasta con pena de muerte a quienes sigan haciéndose fotos de este tipo en esta playa, algo que es falso. Lo que sí es cierto es que las autoridades ya trabajan en restringir el acceso a la playa.

El subdirector del aeropuerto de Phuket, Wichit Kaewsaithiam, apuntaba recientemente a que el acceso del público será prohibido en las próximas semanas. "Queremos que los ingresos del turismo y la seguridad de la aviación coexistan", apuntaba, ya que el peligro no viene tanto por los que se toman el selfie desde la playa sino por la propia seguridad aérea ya que cada vez son más las personas que se agolpan en la playa a la espera de los, también cada vez más, aviones que aterrizan sobre sus cabezas, lo que puede generar problemas de seguridad adicional en un momento tan delicado como es un aterrizaje.

Las restricciones se tomarán en el marco de las adoptadas contra drones y el uso de láser en un radio de nueve kilómetros del aeropuerto.