Según ha indicado la UCA en una nota, la principal novedad de este proyecto radica en integrar cuerpo y mente en la investigación, así como el hecho de contar con un equipo multidisciplinar de científicos para su realización, que reúne a profesionales del área de Fisiología, Psicología y Entrenamiento.

Un total de 29 escaladores, procedentes de diferentes rincones de España e incluso de Argentina y Sudáfrica, se han evaluado mediante la realización de diversas pruebas en las instalaciones de la Facultad de Ciencias de la Educación.

Los participantes en este proyecto realizaron un test de escalada incremental en un rocódromo rodante, con el que se midió la capacidad aérobica, el gasto energético y la frecuencia cardíaca. Previa y posteriormente a este test, se hizo un análisis exhaustivo de composición corporal, se midió el perfil termográfico mediante cámara térmica y se determinó el volumen de antebrazo y fuerza máxima de agarre en regleta.

De forma complementaria a este trabajo, los deportistas realizaron dos tareas cognitivas por ordenador. Por un lado, llevaron a cabo una tarea de Memoria de Trabajo, para obtener una medida de la capacidad de memoria viso-espacial y, por otro, realizaron una tarea autocontrol, para conseguir una medida de impulsividad motora.

Segñun la UCA, aunque aún es pronto para abordar los resultados de este estudio, los marcadores que se obtengan de esta parte del proyecto servirán para analizar el comportamiento cerebral en los escaladores y su asociación con diferentes capacidades cognitivas y de rendimiento.

Asimismo, los participantes hicieron otros dos test de fuerza máxima isométrica y fuerza isométrica intermitente en distintos agarres de escalada, además de analizar también los hábitos nutricionales de los escaladores, tópico que es de especial preocupación en la actualidad en el ámbito internacional, así como la impulsividad, rasgo o predisposición a reaccionar de forma inesperada.

Este estudio se engloba en el proyecto denominado Climbing High Performance International Project 2.0, que ha sido financiado gracias a la ayuda del club de escalada Rupícolas de la Bahía de Cádiz, la clínica de fisioterapia EKIN, Foto Nosotros, Euroholds, Surfaces for Climbing, Sputnik Climbing, Kevala Fisioterapia y Medicina Estética, así como por una campaña de crowfunding promovida por los propios investigadores.