Las personas atendidas por los servicios sociales de Palma disminuyeron un 6,8% en 2018

  • La regidora de Bienestar y Derechos Sociales, Mercè Borràs, ha presentado este jueves la Memoria de la Regidoria 2018, que recoge que el año pasado este departamento atendió un total 27.230 personas, lo que supone un 5,11% de la población de Palma, y 1.633 personas menos respecto al año pasado, lo que supone una disminución del 6,8%.

De estas 27.230 personas atendidas, 22.544 personas fueron atendidas a través de la red de centros municipales de servicios sociales de Palma. Asimismo, el 67% de las personas atendidas son de nacionalidad española y el 31% de otras nacionalidades.

Borràs ha destacado que este año, tras de nueve años de descenso, sube el número de personas de población extranjera atendida con un incremento de un 0,9%. Así, se pasa de atender en 2017 a 6.814 personas a atender en 2018 a 7.051.

"Desde el año 2014 existe un saldo migratorio en Palma, esto quiere decir que el 93% de la población que ha ganado Palma son personas extranjeras", ha explicado Borràs.

En cuanto a las problemáticas que atienden, destacan las dificultades económicas (46,65%), seguidas de las dificultades de convivencia (30%).

En cuanto a las prestaciones, Borràs ha explicado que desde 2010 hay una tendencia a la estabilidad de las prestaciones hasta que el año pasado que empezó a presentarse una ligera bajada que se consolida "este año, con un 9,22% de diferencia de usuarios respecto al 2016, de acuerdo con el incremento del empleo".

DATOS DEL PARO

El paro de marzo baja en términos reales en 3.364 personas respecto al mes anterior, la bajada más importante de todo el estado pero a la vez aumenta respecto marzo de 2018.

"La explicación para nosotros es clara: debe relacionarse el aumento de la población llegada de fuera de la comunidad buscando una oportunidad laboral, a veces no encuentran un empleo y pasan a ser usuarios de servicios sociales", ha explicado Borràs.

En cuanto al tipo de ayudas que se conceden las relacionadas con la vivienda y las de actividades de ocio para niños son las que más aumentan. Así, en 2018 se concedieron 3.000 ayudas para vivienda a las que se destinaron un presupuesto de 1,2 millones de euros.

Borràs ha explicado que aunque las condiciones de las familias mejora, el precio de la vivienda sube. "Hemos tenido que modificar el acceso del catálogo de prestaciones para poder dar cobertura a todas las personas que les hace falta", ha remarcado.

Según ha dicho, antes el nivel de entrada para optar a ayudas de vivienda era de 7.445 euros del indicador público de renta de efectos múltiples y actualmente el punto de entrada es de 9.775 euros.

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