En su informe 'Abandono temprano de la educación y la formación y fracaso escolar: diagnóstico y propuestas', el sindicato plantea derogar la Lomce y flexibilizar el sistema educativo, incrementar los programas de segunda oportunidad, aumentas las becas y ayudas al estudio, reforzar la atención a la diversidad, suprimir el título de Educación Secundaria Obligatoria (ESO), o permitir que el Bachillerato pueda cursarse en cuatro años, entre otras ideas.

El abandono escolar temprano en Baleares se situó en 2018 en un 24,4 por ciento, 6,5 puntos por encima de la media estatal, si bien el informe constata que la diferencia de Baleares respecto al conjunto del Estado se ha suavizado desde 2002, y el abandono escolar temprano se ha reducido más en las Islas que en el resto del país.

Sin embargo, el sindicato ha resaltado las diferencias entre sexos, ya que en la población femenina la disminución ha sido sólo de 7,7 puntos mientras que la masculina ha bajado en 22,3.

Por otra parte, en Baleares han aumentado los alumnos que han obtenido la ESO hasta el curso 2015-2016 y han descendido a partir del curso 2016-2017, algo que el sindicato atribuye a la Lomce, "una ley segregadora, no inclusiva e injusta que es primordial derogar".

Por último, en Baleares la tasa de alumnos de 15 años repetidores es cercana al 40 por ciento.