"Queremos que los barrios del sureste de Madrid dejen de ser solo un territorio al servicio de la ciudad para convertirse en ciudad de verdad". Así valora Enrique Villalobos, presidente de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (Fravm), las propuestas que las asociaciones de vecinos y los Foros Locales de los distritos de Puente y Villa de Vallecas, Latina, Carabanchel, Vicálvaro, San Blas-Canillejas, Moratalaz, Usera y Villaverde han elaborado para impulsar el desarrollo del sur y este de la ciudad.

Este documento estratégico servirá de hoja de ruta a las distintas administraciones a la hora de poner en marcha los proyectos que se consideran más urgentes para estos territorios que agrupan casi a la mitad de la población de Madrid (1,4 millones de personas). La impulsora de este plan es la Oficina Municipal de Planificación y Desarrollo de los Distritos del Sur y del Este.

Este órgano para el diálogo con las administraciones se creó por acuerdo del Pleno del Ayuntamiento de Madrid en octubre de 2018 a propuesta de entidades vecinales "con el objetivo de corregir y erradicar los desequilibrios históricos del sur y el este de Madrid, que acumulan los mayores índices de vulnerabilidad de la ciudad". En total, el informe tiene 237 propuestas, de las cuales 69 fueron catalogadas de máxima prioridas. Estas son las más destacadas:

La regeneración del Medio Ambiente es una de las principales reclamaciones de los vecinos de estas zonas. Con el río Manzanares como eje fundamental, se plantea la creación de un corredor verde que dé continuidad a Madrid Río desde Matadero, y a través del Parque Lineal del Manzanares, mediante un corredor ecológico que una las cuencas del Manzanares y del Jarama hacia el este. La propuesta pretende poner en valor también el valor cultural del ámbito. Otra línea de actuación iría encaminada a reducir las emisiones en Valdemingómez y poner en la mesa diferentes alternativas para acabar con la depuradora de La China.

El transporte público es la prioridad en materia de movilidad para la ciudadanía. La idea es impulsar la implantación de una línea de bus circular (M-35) con plataforma reservada –similar al Bus-VAO– que conecte los citados distritos periféricos y que discurra entre Carabanchel y San Blas. Los vecinos también reclaman la prolongación de la línea de Metro 2 hasta el barrio de Las Rejas y la ampliación de la línea 11 de Plaza Elíptica a Atocha y Conde de Casal. En una fase posterior llegaría a Ciudad Lineal y Arturo Soria. Otras medidas son la construcción de aparcamientos disuasorios, la ampliación de los aparcamientos en la calle para los residentes y la extensión del servicio municipal de alquiler de bicicletas Bicimad.

La ciudadanía quiere que las áreas industriales recuperen protagonismo y generar así empleo en distritos con  una tasa de desempleo por encima del 20%. Las grandes áreas de actuación preferente serían los polígonos de Villaverde, Vallecas, La Atalayuela, Vicálvaro o El Cañaveral. También se plantea la recuperación de los ejes de comerciales tradicionales mediante una rehabilitación integral (alumbrado público, calles, alcantarillado y arbolado) y de espacios comerciales en desuso.

Ante la dificultad del acceso a la vivienda para las rentas bajas el plan contempla una apuesta decidida por la extensión del parque de vivienda pública municipal para ofrecer alquileres a precios asequibles. La otra pata de la propuesta pasa por la rehabilitación edificatoria con una aportación anual de 100 millones de euros al actual Plan MAD-RE municipal.

Para mejorar la calidad en la atención a los colectivos con menos recursos, los vecinos apuestan por un incremento de los recursos de los servicios sociales, tanto personales como materiales, y la agilización y mejora de la Renta Mínima de Inserción (RMI), entre otros.

Las propuestas para el fortalecimiento de la educación pública pasan por la construcción de nuevos equipamientos, la mejora de los entornos y patios escolares, la ampliación de la oferta de Formación Profesional o la mejora en la atención al alumnado con necesidades especiales y a la diversidad.

Los vecinos pretenden que la cultura de calidad llegue a los barrios del sur y el este y reclaman una programación adecuada, así como poner valor lugares como la Quinta de los Molinos o la finca de Vista Alegre. Su apuesta por el deporte base pasa por creación de núcleos deportivos en La Peineta y la Caja Mágica.