La nueva montaña rusa del parque de atracciones del Tibidabo (Barcelona) tendrá una longitud de 718 metros, que recorrerá en 85 segundos y llegará a alcanzar una velocidad de

80 kilómetros por hora. La atracción empezará ascendiendo 33,2 metros de desnivel con motor hasta alcanzar su punto más alto, situado a 522 metros sobre el nivel del mar.

Luego, empezará el descenso de 37 metros con una pendiente del 66%, que permitirá contemplar el Vallès y Barcelona, según ha hecho público en rueda de prensa Barcelona de Serveis Municipals (BSM), la empresa del Ayuntamiento que gestiona el recinto. El requisito para acceder a esta atracción es tener una

altura mínima de 110 centímetros, algo que normalmente cumplen todos los niños de más de cinco años.

La construcción de esta atracción se enmarca en el plan especial del Tibidabo, aprobado en marzo del pasado año. Su instalación va acompañada de polémica, ya que se oponen los vecinos de la zona y todos los grupos municipales salvo el PSC, ya que supondrá la tala de varios árboles. Sobre la polémica de los árboles, BSM recordó hoy que en total, se

talarán unos 50, ocho se trasplantarán y

se plantarán otros 190 en la zona.