La Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León destinará 4,5 millones de euros a las cuatro universidades públicas de la Comunidad para retener el talento a través de una serie de becas agroalimentarias, así como para crear una red de agentes de innovación rural en el ámbito de la bioeconomía.

Este último proyecto se llevará la mayor parte del presupuesto, 3,9 millones, que servirán para que estas universidades lleven a cabo medidas de bioeconomía en los sectores agrario y agroalimentario de las zonas rurales de Castilla y León.

Con ello se busca convertir a las instituciones académicas en "aliadas estratégicas" para poner en marcha "actuaciones innovadoras" a través de proyectos piloto o el desarrollo de nuevos productos o procesos, según ha destacado la consejera, Milagros Marcos, durante la firma del convenio entre la Administración regional y las cuatro universidades, las cuales deberán constituir equipos de acción de dinamización rural para promover el desarrollo de nuevos mercados, poner en contacto actores "idóneos" para esta labor, acompañar en la búsqueda y gestión de posibles fuentes de financiación, priorizar el asesoramiento a emprendedores e impulsar acciones para el desarrollo de la bioeconomía en el medio rural.

Para ello, tendrán el cometido de realizar la prospección del territorio e identificar las necesidades, coordinar la ejecución del programa, seleccionar y contratar a los agentes de innovación rural necesarios, promover los proyectos o iniciativas, comunicar los resultados y compartir la información.

Los agentes de innovación rural recibirán formación planificada, promovida y desarrollada por las universidades, las cuales se ocuparán también de la capacitación en materia de bioeconomía, la actualización de conocimiento y de habilidades de personal, la coordinación, control y seguimiento de la actividad formativa, la elaboración de contenidos y el diseño de la programación, su ejecución y análisis, así como la selección del personal formador.

TRANSFERENCIA TECNOLÓGICA

Como actividad "fundamental", las universidades realizarán la transferencia tecnológica y divulgación y promoción que supone la bioeconomía en la dinamización rural, tendrán como cometido la generación de un "amplio" grupo de interesados y colaboradores como agentes científicos, sociales y económicos, al tiempo que diseñarán campañas de promoción y publicidad para facilitar el conocimiento, diálogo y difusión en el medio rural, lo cual estará acompañado de un programa de jornadas, foros y reuniones.

Para lograrlo, se creará una estructura de apoyo a través de tecnologías de la información e infraestructuras técnicas.

Junto a esto, los rectores de las universidades de Burgos (UBU), León (ULE) y Valladolid (UVA) -Manuel Pérez, Juan Francisco García y Antonio Largo, respectivamente-, además del vicerrector de Relaciones Internacionales de la de Salamanca (USAL), Efrem Sildik, han firmado con Milagros Marcos un segundo convenio para que las fundaciones generales de estas cuatro instituciones académicas pongan en marcha un programa de becas en el sector agroalimentario de Castilla y León, dotado con 600.000 euros.

Se busca con ello promocionar formación especializada para trabajar en la industria agroalimentaria, en materias o tecnologías demandadas por este sector, además de "retener el talento", como ha subrayado la consejera en el acto de rúbrica, que se ha celebrado este viernes en Valladolid.

Las fundaciones generales de estas universidades llevarán a cabo la selección de los jóvenes, mientras que los destinatarios de las agrobecas recibirán una ayuda equivalente al coste total de la formación -gastos de matrícula y formación, viaje, alojamiento y manutención durante el proceso formativo- hasta un máximo de 30.000 euros por alumno.

CONTRATOS PARA LOS BECARIOS

Por su parte, las empresas empleadoras participarán en la selección de los alumnos y se comprometerán a contratarlos durante un periodo mínimo de seis meses. Podrán solicitar esta beca los menores de 35 años nacidos o residentes en Castilla y León que sean titulados universitarios o de Grado Superior de Formación Profesional en la Comunidad, de cualquier titulación que esté relacionada con la industria agroalimentaria.

En declaraciones recogidas por Europa Press, Marcos ha subrayado que estas iniciativas se pondrán en marcha "de manera inmediata" y su aplicación inicial tendrá una vigencia de dos años. Asimismo, ha subrayado su importancia para "luchar contra la despoblación" ante el "futuro" que representa para la actividad económica en el medio rural.

Por su parte, el rector de la UBU, Manuel Pérez, se ha felicitado por el reconocimiento que la Administración ha hecho de las universidades como "motor de desarrollo económico y social", al tiempo que ha deseado que esto sirva para fomentar una "mayor y mejor" colaboración entre universidades.

En este sentido, su homólogo en la ULE, Juan Francisco García, ha defendido que el campo "necesita recursos y servicios" y ha resaltado la "importancia" de que se hable de ello, cosa que "no ocurría hace diez años".

El rector de la UVA, Antonio Largo, ha defendido que se trata de un proyecto "de futuro" para "buena parte" de sus egresados con una "formación de calidad", en tanto que el vicerrector salmantino, Efrem Sildik, ha expresado su "alegría" por las posibilidades que ofrece este sector.