Según ha explicado la Policía en una nota, los hechos se produjeron la madrugada del pasado 26 de febrero cuando un indicativo detectó en la Avenida Ponce de León a un conocido delincuente portando un carro de la compra con múltiples efectos en su interior del que no daba razón de su posesión.

Entre los efectos se encontraban altavoces, aspiradoras de vehículos y cargadores de teléfonos móviles, entre otros. Así, debido a que podían provenir de algún ilícito penal, y en tanto no se demostrara la legítima posesión, los agentes procedieron a intervenir los objetos que transportaba el sospechoso.

A la mañana siguiente una persona interpuso en la Comisaría una denuncia por un robo en su vehículo. Según señaló, tras fracturarle la ventanilla trasera le sustrajeron una serie de efectos, los cuales se correspondían perfectamente a los recuperados.

Así, tras reconocer el propietario sus efectos se le hizo entrega de ellos y se organizó un dispositivo para la localización y detención de la persona que inicialmente los portaba. Finalmente fue localizado, detenido y puesto a disposición judicial.