Los educadores de calle de Mollerussa atienden cerca de 30 familias en un año

La mayoría de los adolescentes atendidos (un 44%) son catalanes, un 41% son magrebíes y el resto se reparten entre rumanos (7%), sub-saharauis (4%) y latinoamericanos (4%).Con respecto a las edades, la mayoría de los adolescentes a los cuales se ha hecho un seguimiento tenían entre 13 y 16 años y eran en un 74% de los casos de sexo masculino.

Según ha explicado uno de los dos educadores de calle que tiene el Ayuntamiento de Mollerussa, Òscar Gallinat, uno de los objetivos para este año es trabajar más la fase preventiva de los adolescentes.

Por eso, Gallinat ha señalado que van a todos los claustros de Infantil y Primaria de los centros educativos de la ciudad "con la finalidad de hacer ver la necesidad a los profesores que trabajan día a día con los niños y que al mínimo indicio de una conducta de riesgo se nos avise para poder intervenir a tiempo".

Por otra parte, Gallinat ha señalado que una de las características más importantes que han detectado es que, aunque un 80% de las estructuras familiares están formado por el padre, la madre y los hijos, casi un 90% de las mismas funcionan de forma monoparental.

Eso quiere decir que básicamente todo el peso de la casa y de la gestión de los problemas con los hijos recae sobre la madre y el padre está ausente. Según los educadores de calles, son estas madres las que necesitan una ayuda externa y está aquí donde ellos intervienen más.

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