Según ha informado la Guardia Civil en una nota de prensa, a este hombre de 30 años y con un amplio historial delictivo a sus espaldas lo buscaban desde febrero de 2018, cuando supuestamente robó con violencia e intimidación una motocicleta y después la utilizó en un atraco a una gasolinera.

Al detenido la Guardia Civil lo relaciona además con el robo en 2017 de un vehículo en Pinos Puente al que después pegó fuego; con un robo con fuerza en las cosas en una vivienda de Pinos Puente también ese año; y con la pertenencia a un grupo criminal, pues "era uno de los integrantes de una banda que se dedicaba al robo en interior de camiones", la cual fue desarticulada el pasado mes de noviembre de 2018.

Además, tres juzgados granadinos habían ordenado mediante requisitoria la búsqueda, captura e ingreso en prisión de este delincuente. El Instituto Armado supo que este hombre volvía a estar en la localidad y averiguó donde vivía actualmente, y solicitó entonces autorización judicial para entrar en la vivienda y detenerlo.

Este pasado martes por la mañana, una vez autorizados, se realizó la entrada y registro en la vivienda y los agentes no solo localizaron a este escurridizo delincuente, sino que hallaron una plantación de cannabis sativa donde crecían 693 plantas en avanzado estado de floración.

Por ello, a los delitos por los que ya se le buscaba, hay que sumar otro contra la salud pública por cultivo de droga y un delito de defraudación de fluido eléctrico, por los que ha sido también detenida su actual pareja, de 25 años.